
He comprado unos botines rojos de Piccoro, The Monch me ha lanzado una onda vital pero la he frenado con mi rayo maléfico. Ahora toca barrer los cristales de la puerta de la cocina. Tener superpoderes es lo que tiene...
Este diario es una vía de escape de esta cabeza loca que tengo. Simplemente me lanzaré sobre el teclado como infectada por un virus que me obliga a dejar por escrito cualquier cosa, por absurda que sea. Y, la verdad, estoy convencida que me va a sentar de un bien...
3 comentarios:
jejejeee te quedan más que bien
¡y no olvides el poder del puntazo con el botín en el culo del que se pase! ya te digo yo que no se atreven otra vez contigo!!
un besazo preciosa, cómo me gusta saber de tí aunque sea así, de 'temps en temps' espero que tu casita ya esté casi por inaugurar ¿no???
oye mi niña, que esta noche desaparece Date prisa, si quieres seguir leyéndome, a parte de desde el Averno, tendrás que ir aquí:
http://sirvemeunvermut.blogspot.com
felices vaciones y felices fiestas!! :****
por mi parte, yo ya 'te mudé' allá :D
Muchas gracias guapa, ya cambié el enlace ¡¡¡te mueves más que los precios!!! Un bico y felices fiestas.
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