El paso del tiempo

Seguro que todo el mundo es consciente de los cambios físicos que sufre con el paso de los años. Muy a mi pesar no he heredado el cutis sin arrugas de mi señora madre, sino el de mi padre, que aunque es un señor muy resultón, con una gran caída de ojos, eso dice siempre, parece un defensor del famoso lema de Adolfo Domínguez: "La arruga es bella".

Hace un año, ya tenía las típicas patas de gallo, pero es que ahora mismo, éstas se extienden peligrosamente y además han aparecido otras parientas transversales. De todos modos, además de las arrugas, los desastrosos efectos de la gravedad y achaques varios, lo que más me sorprende, no sé si cabrea, del paso de los años es como afecta al carácter.

Seguro que más de uno ha escuchado eso de "con los años te has vuelto aun más...". Yo pensaba que esto se hacía realmente palpable a eso de los 70 u 80 años, pero no, ¡yo ya soy consciente de mis cambios a los 30!. Tengo menos paciencia y soy más maniática con tonterías como que no haya arrugas en el mantel o que los cuadros estén derechos. Me he vuelto mil veces más llorona y la excusa de "es que estoy más sensible que tengo la regla" ya no cuela cuando a una le sale la lagrimita con la peli de las 15:30 o me pongo a llorar en cuanto Clint Eastwood le ofrece un cigarrillo a Meryl Streep en el minuto 10 de los Puentes de Madison. Para rematarla tengo más dependencia del mozo que antes, ¡si es que lo echo de menos en mis fiestas "de soltera"!... Seguro que no soy la única que se da cuenta de estas cosas ¿verdad?. Estaré al tanto de los comentarios y espero no sentirme un bicho raro...

17 comentarios:

Anónimo dijo...

Tu tranquila mujer, yo un día decidí no fijarme más en las arrugas porque de tanto mirarme llegué a la conclusión de que en los surcos de mi cara se podían sembrar patatas y que como no era temporada mejor me daba la hidratante/nutritiva/antiarrugas/liponosecual/megafirme y listo.
Animo, lo superarás. Un beso

Tocotó dijo...

Si tienes toda la razón, yo intento ser constante con esas cremas de nombres tan raros, pero soy un desastre... Resignación... ¿pero que me dices en los cambios de carácter?¿a ti no te pasa? :-S

Laura Vila dijo...

Pasa hasta con 24. No te preocupes y disfruta de cómo seas y como estés ahora. Todo cambia.

Anónimo dijo...

Bueno, de los cambios físicos que usted dice que está sufriendo, sólo decirle que ya le gustaría a muchas de veintipocos :-) (Que no se enfade The Monch que ya sabe que, para mí, usted es un ángel)
En cuanto al carácter, es normal y nos pasa a todos, uno ya está un poco de vuelta de casi todo y aguantas menos que antes...nada de que preocuparse...

Este finde prometo contarle cotilleos, seguro que nos echamos unas risas...
1beso

Anónimo dijo...

Para mí, el último anuncio de coca cola refleja muy bien eso de lo que hablas, ya sabes: " que levanten la mano las que renegaron de su madre y terminaron pareciéndose a ella "...
Son todo etapas, y cada una tiene su fase interesante, no crees?
Hace años que uso contorno de ojos y parece hacerme cosquillas. Es normal que nos hagamos más dependientes unos de otros.Las lágrimas se han convertido en una válvula de escape, y da igual el motivo: la película de sobremesa, las noticias de las 14:30, ...Y en cuanto a la paciencia y las manías, es lo que nos hace diferentes.
Así que no te preocupes, Tocotó, que la experiencia es un grado.Y, en tu caso, querido pulpito, ganas mucho con los años. Palabra de redondita.

Anónimo dijo...

Ay, ¡qué tema! yo.... trato de pasar de él cada vez que puedo. Por eso hice el instructivo que miraste en mi blog para verse en el espejo :)

Mary Lovecraft dijo...

Bueno Tocotó bonita! yo creo soy de esas que no va teniendo muy presente-constante al menos conscientemente, lo del paso de los años...es verdad que el físico es lo que más nos salta a la vista pero el carácter también está ahí y de igual forma Kronos se asegura de amoldarlo teniendo en cuenta nuestras propias vivencias (joer, pero mira que me puedo llegar a poner filosófica!.
Yo siempre lo dije y de esto me dí cuenta en la época que trabajaba con personas mayores (abuelos) y es que hay un dicho que no dejé de corroborar al haber tenido este contacto tan directo con ellos y viene a decir másumenos que, tal como hayas sido de jóven, igual serás de viejo....pero de forma acentuada. Es decir si fuiste agradable, comprensivo, pacienzudo, solidario y con empatía, de mayor serás una bella persona de edad (que aunque parezca increíble también exiten, doy fé) pero si fuiste un hijo de "@@#--&&, que fuiste a lo tuyo, pisando pescuezos y a los dem´s que le dieran, serás un cabron**zo de mucho cuidado, (también doy fé directa por lo vivido y que cuento arriba.
Vamos, que el mito del Ebanezear Scrooge o como se escriba (el protagonista de "Cuento de Navidad" de Charles Dickens que eran tan cabroncete y a la hora de morir tiene la oportunidad de cambiar a bien y cambia), no existe o yo aún no dí con él.

Así que, sólo nos queda ser buenas personas en el presente y no dejar que las circunstancias nos avasallen y corrompan hasta el punto de comerse nuestra propia personalidad ¿no? ;)

oye Tocotita, ¿te fijaste que yo puse una entrada relacionada con el mismo tema ---> AQUÍ ???

jeje!

Petete dijo...

El paso del tiempo se nota mucho. He de decir que yo físicamente no me veo muy cambiada (no hay más que ver mi piel de colores tersa y mi pico impecable) pero emocionalmente las cosas cambian. Sobre todo noto que me canso mucho más saliendo de marcha, supongo que tiene que ver la costumbre con ello, pero hasta puedo decir que ya no me gusta tanto, me aburre. En cuanto a sensibilidad, yo nunca he llorado con películas, y ahora casi menos, pero no sé cuál es el motivo, simplemente las veo como eso, películas. Eso sí, en lo que se refiere a las cosas del día a día, mi actitud ante ellas sí que ha cambiado. Ahora valoro más determinadas cosas que antes pasaban como desapercibidas, y también me molestan otras muchísimo más, como por ejemplo la hipocresía...No la soporto, antes tampoco, pero ahora menos.

En fin, Tocotó, que los años se notan para todos, eso es obvio. No dejes de lado las cremitas...

Tocotó dijo...

Laurita: Bueno, bueno, ya a los 24, ¡¡¡qué pronto!!! Miedo darás a l0s 30 ;-)...

Sr. Anónimo: Muchas gracias por el piropo, así da gusto, los próximos posts me dedicaré a quejarme de asuntos varios. Ya me muerdo las uñas pensando en los cotilleos...

Pelotita: El anuncio es genial, verdad, y la frase de las madres es la más acertda de todas. Y lo de ganar con los años, pues es verdad, ¡qué leches! Si es que las mueres somos como el vino, mejoramos con el tiempo.

Noemi: Genial lo del espejo, pero mantengo un tiempo prudencial a que pasen los excesos carnavaleros antes de observar el reflejo de cintura para abajo...

Mary: Un razonamiento basado en pruebas esperimentales, que puedo decir, amén. Completamente de acuerdo. Con los años se acentúa lo bueno y por desgracia, también lo malo. Respecto al post, palabrota de pulpito que no copié... Es más, me recordó el día de San Valentín (hace muuuchos años) que hice unas pastitas en forma de corazón, con receta de mi santa madre, muy facilitas de hacer y salieron bien...

laonza dijo...

Ha el espíritu no le salen arrugas, ni celulitis, ni patas de gallo, ni blosas, ni ojeras..., cuando te veas en el espejo trata de verlo mejor a él...y a lo hecho pecho nena que los años te dan y te quitan en eso consiste no? ahhh una crisi de eso seguro... dale play al "everything gonna´ be all right"
besos

Tocotó dijo...

Petete, es verdad, se notan los cambios en todos los sentidos y no es que me preocupen demasiado. Laonza, este post no refleja para nada la crisis de los 30 o cosas por el estilo. No soy de esas personas que les moleste cumplir años. El propósito de esta entrada era poner por escrito algo que quizás tengo más presente estos días que hace unos años y que me produce curiosidad, pero nada más... Crisis yo??? Tururú.

Lo de las cremitas es cosa de disciplina, lo sé, pero soy una vaga...

laonza dijo...

Ups pues lo siento mi pulpiss... que buena respuesta entonces besos!

M Knight dijo...

Vaya, este blog va demasiado rápido para mí. Iba a contestar a este post y ya me he encontrado uno nuevo.

De todas formas, lo único que quería es aclarar que Tocotó no es un ser decrépito y maniático, en contra de lo que puedan dar a entender sus descripciones.

En cuanto a lo demás, pensaba comentar algo, pero es muy difícil sin hablar de uno mismo. Y eso prefiero hacerlo en el café de las seis, así que quien quiera que se apunte.

Tocotó dijo...

Gracias por la aclaración, qué petarda soy, tampoco tenía intención de definirme así, pero bueno...

En el café de las seis, me cuenta esas intimidades...

Anónimo dijo...

Hola Tocotó!!

Hoy he leído en el periódico que allá por los mares australes de Nueva Zelanda han encontrado un descomunal calamar de 10 metros de largo y con ojos del tamaño de un coche medio.

Siendo tú otro cefalópodo, primo hermano del citado (aunque ellos no puedan lucir tu saludable tono esmeralda)... ¿no tienes curiosidad por ver cuánto puedes llegar a medir?

La de cosas buenas que te esperan!!!

A ver cuando me das un buen abracito con todas tus patitas.

The Monch

Anónimo dijo...

En realidad, los ojos eran del tamaño de las ruedas de un coche medio.

The Monch

Tocotó dijo...

Querido The Monch, los abracitos con todos los tentáculos los tiene asegurados todos los fines de semana (snif).

Lo de llegar a medir tanto no sé si me produce ilusión o miedito, ¿qué le parecería un abrazo con unos tentáculos de 6 metros? Lo dejo a su elección...